viernes, 19 de noviembre de 2010

Corto


Llegando a la luz,
agresividad destellante,
mordisqueando tu vida
o cuerpo que deseo
salvajemente.

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Viajera inmóvil


Así existes,
existes como existe el fulgor
de un planeta,
como esa diminuta luz que vemos
como estrella o sol.
Esa palidez lunar,
eres la luna abandonada
en la noche, esa luna que olvidamos
que matamos, olvidándonos
que todavía tienen un tibio calor
de carne.
Así tu cuerpo como laberinto,
tu cuerpo como galería de encuentros,
tu cuerpo o petálo,
poblado de cicatrices que fueron
mariposas en tu vientre.
Tu cuerpo o agujero negro,
succionando, devorando,
esperando esa caricia
que le devuelva la primavera
como luz que de calidez.
Así existes,
expectante, inmóvil,
esperando que algún barco
llegua a tu puerta.
Escuchas a tus voces
decir que debes refugiarte,
porque tienes miedo,
porque no se puede saltar,
(te escondes en el lenguaje)
Pero no arremetas viajera!
(llegará el día que no habrá lenguaje en donde refugiarse)

Feroz


El grito,
ese gemido que rasga tu cuerpo,
ves pasar las noches entres tus dedos
quieres con desesperación
que todo sea distinto
que no duela este perpetuo mirar
mirar fijo, errante.
Presientes que ese grito te destruirá
algun día, no puedes contenerlo.
Niña! Niña! Niña!
Rasgo la pared:
no alcanza.
Corres como desesperada
agarrandote las trenzas,
haciendo girones tu alma
como papel que da al cesto.

La noche puede convertirse
en desolación, es abrumador
ver ese cielo gigante
poblado de estrellas
y vos tan estúpida
tan ridiculamente hermosa
te entregas a la faena
y a ser despedazada

Ahora tus ojos,
destellan odio y sos
una diosa vengadora,
tus venas estallan,
la sangre bombeada,
el orgasmo,
la noche,
silencio,
no fue nada,
silencio,
vacío